El jueves 25 de mayo River estará cumpliendo 122 años desde su fundación y, la celebración será a lo grande, tal como es River.

Porque ese mismo día, a las 16 se estará inaugurando la gigante estatua de Marcelo Gallardo.

Tras varias postergaciones por diferentes motivos, este 25 de mayo verá la luz la estatua del Muñeco, quien estará presente cuando se descubra la estatua en su homenaje.

Queda por saber si concurrirá algún integrante del plantel que logró la gesta en Madrid el 9 de diciembre de 2018.

Por lo pronto, el técnico más ganador de la historia de River estará allí para contemplar la obra construida en su honor.

Luego, por la noche, todos los riverplatenses estaremos atentos a lo que ocurra con River en Perú, en el encuentro que el equipo de Martin Demichelis enfrentará al Sporting Cristal, por la cuarta fecha del Grupo D en la Copa Libertadores.

 

Matías Almeyda, quien acaba de salir campeón con su equipo, el AEK, de Grecia, en su primera experiencia dirigiendo en Europa, habló acerca de cómo ve al River de Martin Demichelis.

«A River lo veo espectacular. Me pone contento que esté así porque no era fácil agarrar después de Gallardo, pero Demichelis logró imponer un estilo de juego manteniendo seriedad», dijo Almeyda.

«A Demichelis se lo ve tranquilo desde afuera, tratando de jugar un buen fútbol. Es magnífico verlo así».

Con relación a si piensa en algún momento volver a ser el técnico de River, el Pelado fue contundente.

«Mi tiempo en el club fue ese. Me tocó retirarme en aquel momento y tuve que hacer el sacrificio. Lo que tenía que dar, lo di», dejando en claro que por el momento no se le cruza por la cabeza volver a sentarse en el banco de El Más Grande, por más que fue quien lo dirigió para devolver al equipo al lugar del que nunca se tendría que haber ido.

El técnico de River habló luego de la derrota sufrida en Córdoba ante Talleres, explicó cuál fue su táctica para este encuentro, y se refirió a lo que sigue.

«Terminamos dentro de todo bien, haciendo el 2-1, dominando en cuanto a la posesión e intentando llegar por todos lados, pero no se pudo. Hay que felicitar a Talleres, que ante un mínimo error nos hizo sacar del medio».

Por qué no jugó Aliendro: «Talleres juega similar a un sistema táctico que usó Huracán, para defender un 4-4-2, cuando la tienen 4-2-3-1. Veíamos que se quebraban muchísimo a la hora de iniciar, se partía el equipo en un 5 vs. 5. Nosotros nos defendíamos con seis y pretendíamos robar y hacer daño con De la Cruz, Nacho, Barco y los dos puntas jugando mano a mano. En Huracán salió bien y acá no. Estábamos convencidos, ellos no tenían mucha gente en el medio, se partían muchísimo. Por eso lo entrenamos desde el principio de la semana. Nos había salido bien en la semana, en el partido, no».

Con relación a su esta derrota puede afectar en lo anímico, Demichelis dijo.
«El factor emocional es uno de los más importantes, no digo que el equipo se haya relajado. Por eso siempre digo que no hay campeón con 37 puntos. Hay que seguir trabajando con humildad y respeto a la profesión. No tengo dudas de que nos vamos a levantar. Conocimos la derrota después de 11 partidos y dos clásicos».

«Se perdió contra un buen equipo, que por momentos nos la puso bien difíciles, cosa que no nos venía pasando».

Después de un primer tiempo en el que River y Talleres se generaron peligro mutuamente aunque el Millo estuvo más cerca de convertir, en el complemento, en una ráfaga de 10 minutos, cuando el equipo de Demichelis andaba mejor, los cordobeses se pusieron en ventaja.

River tuvo dos caras, la defensa dió ciertas ventajas al igual que Talleres, provocando que los arqueros mantuvieran sus arcos en cero con buenas intervenciones. Así se fue la primera etapa.

En la segunda mitad fue River el que tomó las riendas del encuentro pero, Talleres, que juega bien, fue contundente y las dos veces que tuvo la oportunidad de convertir, lo hizo. En tanto River, se acercaba con peligro y cuando estuvo por empatar, la T marcó el 2-0. Ambos goles fueron convertidos por Garro.

El Millonario sintió el impacto pero aún así, más con ganas que con fútbol fue a buscar el descuento y lo consiguió a través de un gol de «palomita» de Suárez, quien entró unos minutos y marcó la diferencia, al igual que Solari ya que ambos le dieron movilidad al ataque, al que también se sumó Borja y un cabezazo suyo pegó en Enzo Pérez.

Llamó la atención la ausencia de Aliendro en el once titular y la inclusión de Rondón ya que si bien Demichelis decidió jugar con dos delanteros, el venezolano todavía no entró en sintonía.

Así las cosas, River ahora le lleva cinco puntos de ventaja a San Lorenzo y siete a Talleres. El próximo domingo el Millo recibirá a Platense a partir de las 20.30.

 

Tras el entrenamiento del plantel realizado esta tarde, se detectó que Emanuel Mammana tiene una inflamación en su rodilla izquierda, producto de estar aquejado de sinovitis.

De esta manera, el central que tuvo una buena actuación ante Boca se perderá el encuentro contra Talleres y no será incluído en la convocatoria para este partido.

Quienes si estarán en la consideración de Martin Demichelis son el arquero Santiago Beltrán, de la Reserva, Matías Kranevitter, quien jugó un tiempo este sábado y Paulo Díaz, quien no estuvo apto físicamente para el superclásico, aunque tal vez sea el reemplazante de Mammana en Córdoba.

 

Este sábado a la mañana, el equipo de Marcelo Escudero le ganó por 3-0 a Talleres de Córdoba con golazos convertidos por Esteban Fernández, el Diablito Echeverri y Agustín Ruberto.

Con este resultado, River se colocó nuevamente como escolta de Vélez, el único líder del certamen.

El encuentro marcó el regreso de Matías Kranevitter a la actividad, fue el capitán, luego de una larga recuperación tras haberse fracturado un tobillo en un partido amistoso ante Unión La Calera, y así pudo comenzar a sumar minutos.

Martin Demichelis estuvo presente en las tribunas observando las acciones del encuentro.

El próximo rival será Platense, en condición de visitante, por la 17a fecha.

 

A ya casi prácticamente una semana que se jugó el Superclásico en el que River le ganó 1-0 a Boca, el tema de la actuación del árbitro Darío Herrera y el penal que cobró en el final del partido, sigue dando que hablar, sobre todo por las quejas del otro equipo.

Al respecto, el que salió a hablar sobre el asunto fue Enzo Francescoli.

«A veces te favorecen, a veces no. Cuando uno la pasa mal y pierde, en las 48 horas posteriores se queja. Lo que más noto, en una crítica constructiva, no lo digo por un programa particular, el fútbol pasó a ser buscar diferencias en los árbitros. Se busca una grieta que no hay que buscar. En el contexto de los 90 minutos, River fue más que Boca. El penal puede ser más fuerte o más débil. Yo me he tirado como jugador. Sí fue penal. Desde el palco, veo la reacción de los jugadores, eso te marca lo que pasa», afirmó.

Por otra parte, el Príncipe agregó. «Herrera dirigió mal para los dos lados. Dejó pasar un montón de cosas porque sino el partido terminaba siete contra siete. Hay un montón de árbitros a los que les faltó conducción y no los pararon».

En otro orden, se lo consultó acerca de si jugadores que están en el exterior pueden llegar a River. «Con relación a los jugadores que puedan volver, depende de ellos. Yo no les puedo decir que acá está todo divino y resulta que se jugó un Superclásico y hace seis días que se está hablando del árbitro», sentenció.

Rodrigo Aliendro, quien a base de esfuerzo y perseverancia se ganó un lugar como titular en River, a tal punto que se convirtió en una de sus figuras, hizo un repaso de su carrera, y expresó lo que siente al vestir la camiseta de El Más Grande.

«A veces me gusta ir a ver fútbol a la cancha de los clubes donde jugué para revivir todo lo que me pasó».

«Cuando me pongo a pensar lo que pasó en mi carrera lo disfruto más. Siempre me acuerdo de los clubes, las canchas y trato de valorar cada momento. Estar acá en River, vestir esta camiseta, es un sueño para mí. Llevo ocho o nueve meses y trato de todos los días disfrutar y exprimir todo para dar lo mejor», contó.

Ante la consulta sobre qué lo sorprende de River consideró: «Todos los días la verdad me sorprende el club, vayas donde vayas, ya la gente te conoce. En los otros clubes me ha pasado pero quizás era en ciudades más chicas. Siendo jugador de River, vayas donde vayas, siempre hay alguien que te conoce, que te apoya y la verdad que está bueno».

«Es totalmente diferente: ganás el domingo, se disfruta el lunes y luego ya hay que pensar en el próximo domingo. También me tengo que acostumbrar a eso. Está bueno porque no permite que te relajes ni nada de eso. Hay que trabajar todos los días por la competencia y para dar lo mejor en cada entrenamiento. Sabemos que somos River y tenemos que pelear todos los torneos. Trataremos de hacerlo hasta el final”.

El Tribunal de Disciplina de la AFA dió a conocer las sanciones para los jugadores de River que estuvieron involucrados en el tumulto que se produjo en el final del Superclásico.

El árbitro expulsó por el lado de River a Agustín Palavecino, Ezequiel Centurión y a Elías Gómez.

Los tres futbolistas del millonario recibieron una fecha de suspensión, por lo que no podrán estar presentes en el partido de este domingo ante Talleres, en Córdoba, por la 16a fecha de la Liga Profesional. De esta forma, podrán reaparecer en la fecha 17, en ocasión del partido que River jugará con Platense.

 

Esequiel Barco fue uno de los tantos jugadores que esté miércoles dialogaron con la prensa luego del entrenamiento, en el que los medios pudieron observar la parte final de la práctica.

«Durante los 90 minutos lo buscamos todo el tiempo”, se refirió con relación al Superclásico.

“Eramos el único equipo intentando buscar la victoria, es hermoso ganar un clásico en el último minuto. Mucha euforia y con la gente que es única, fue algo extraordinario”.

A su vez, Barco también hizo referencia a la derrota sufrida ante Fluminense.

«El partido en Río de Janeiro fue una excepción, nos comimos cinco goles pero no fue lo que planteó el partido. Salimos rápido de esa derrota y ahora estamos disfrutando esta victoria“, cerró.