Pablo César Solari, quien le debe sus nombres a la admiración que sus padres tienen por Pablo César Aimar, contó qué le dijo al ahora integrante de la Selección el viernes a la tarde cuando River enfrentó a los campeones del mundo en un partido informal.

«Me había sacado una foto con Aimar cuando había ido a un Sub 17, pero había sido rápido. El viernes hablamos bien, nos presentamos y le dije que era un orgullo conocerlo”.

Con relación a su actuación en el amistoso ante la U de Chile, partido en el que convirtió un gol, Solari expresó.

«Es lindo jugar bien, es lindo hacer goles, ganar. Estoy para aportarle al equipo donde me necesite. Venimos muy bien, hay una competencia sana”.

-«Después de la lesión contra Boca nunca pude volver a ser el mismo. De a poco voy agarrando confianza, me vuelvo a sentir bien. Trabajo todos los días el doble o el triple para volver al nivel en el que estaba».

«Tenemos un grupo excepcional, ellos te hacen sentir bien. Cuando no me salen las cosas tiendo a bajonearme y sentirme mal, pero ellos me aconsejan. Es un grupo muy lindo, increíble», resaltó.