De la misma manera que miles de hinchas despidieron a los micros del plantel en su camino hacia La Boca, tras el triunfo por 2-0, fueron recibidos por una multitud en los alrededores del Monumental.
Los jugadores fueron recibidos con banderas, bombas de humo, cantos agradeciendo la victoria sobre el eterno rival mientras caminaron junto a los micros hasta que hicieron su ingreso al playón que está sobre la Avenida Udaondo.
El plantel bajó de los micros y, antes de meterse en el Estadio Monumental para retirar sus pertenencias y dirigirse a sus hogares, se tomaron un tiempo para saludar a la gran cantidad de gente que se congregó para recibirlos victoriosos.
Tras semanas en los que se criticó desde algunos sectores de la prensa la manera en la que juega River de visitante y los planteos tácticos, sumado a los cambios que realiza Martin Demichelis durante los partidos, este domingo quedó demostrado que hay unión y compromiso entre jugadores y cuerpo técnico ya que se notó a las claras en el verde césped que había un plan y que se ejecutó a la perfección.
El último campeón del futbol argentino derrotó a Boca por segunda vez en lo que va del año, sin recibir ningún gol de su rival, con Martin Demichelis sentado el banco desde hace apenas nueve meses, lapso en el que ya ha ganado un título.