Ante la imposibilidad de utilizar el estadio Monumental hasta principios de 2021 por las obras que se decidieron realizar, los dirigentes de River se comunicaron con sus pares de Vélez para alquilar el Amalfitani y hacer de local en ese estadio para los partidos de la Copa Libertadores.

Los de Liniers no ven con malos ojos que El Más Grande juegue en su estadio los partidos que le corresponden por la zona de grupos contra San Pablo y Liga de Quito pero, habría una cuestión a resolver.

La iluminación del Fortín no cumple con los requisitos exigidos por la Conmebol, es decir, debería pasar su sistema lumínico a tecnología Led. O, en todo caso, de no hacerse la obra, River podría jugar igual allí pero pagando una multa.

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