Una vez concluido el partido que River le ganó por 3-1 a Arsenal, cuando el árbitro del encuentro, Fernando Espinoza se retiraba hacía los vestuarios, desde la platea San Martín baja inferior, un hincha le pidió sus tarjetas, y el juez se las regaló.
Durante el partido, el juez sacó una tarjeta amarilla para cada lado. Por el lado del equipo de Martín Demichelis amonestó a Ramiro Funes Mori y por Arsenal a Joaquín Pombo. Y, en cuanto a las incidencias del encuentro, cobró un penal a favor de River a instancias del VAR por una mano de Néstor Breitenbruch que Miguel Borja cambió por gol, promediando el segundo tiempo.
Espinoza, que en varias ocasiones fue noticia por actuaciones polémicas, en la noche del domingo en el Monumental, en términos generales realizó una buena labor manteniéndose siempre cerca del juego, aplicando bien la ley de la ventaja cuando hizo falta, como así también cobrando correctamente cada infracción que se cometió, siendo acertadas las dos tarjetas amarillas que mostró.
River recibirá en la próxima fecha a Atlético Tucumán en el Monumental, el jueves, a partir de las 21.